La tecnología fue durante milenios la fiel compañera del hombre en su afán de superación. Desde la revolución industrial hasta estos días, el hombre entendió realmente que la velocidad y los recursos que aplicara a la tecnología serían directamente proporcionales a su bienestar y calidad de vida. Ante eso, y como uno de nuestros grandes defectos como especie, nos dedicamos indiscriminadamente a la tecnología. Nunca nos detuvimos a pensar cómo y dónde aplicarlo, solo hasta hace unas pocas docenas de años.
En este espacio pensamos que la correcta aplicación de nuestros descubrimientos tecnológicos es un proceso creativo y ordenado, es la forma de tomar la tecnología de la mano en nuestro proceso de crecimiento.
«La inspiración existe, pero tiene que encontrarte trabajando» Pablo Picasso